domingo, 19 de mayo de 2013

Y como remedio: Volar

Apenas es ya uno de los numerosos recuerdos que atormentan mi alma. Uno de esos recuerdos que ni toda la tinta del mundo, por muy mágica que sea, consigue sanar.
Pero es que veces tenemos secretos escondidos en forma de recuerdos que atormentan el alma y paralizan al corazón, haciéndonos sentir débiles.. aunque al final sea la única manera de poder ser más fuertes.
Lo sé, es un juego enrevesado en el que tenemos mucho que perder. El de enfrentarnos a nuestros peores recuerdos, digo. Por si no quedaba claro siempre son ellos los primeros en mover ficha, pillándonos desprevenidos cuando menos nos lo esperamos, haciéndonos retorcer de dolor aunque sea solo por un segundo. Está de más decir que  juegan con ventaja, tienen unos poderosos alíados: los sueños y la memoria. En cuanto a nosotros... solo nos queda la promesa del tiempo, la paciencia para curar nuestras heridas y ese pequeño defecto de fábrica que tenemos todos de ir olvidando pequeños detalles que en otro tiempo nos parecieron el mundo entero.
Y en tiempos de tregua... tenemos que intentar volar. Volar para intentar olvidar que el hecho de que oigamos latir a nuestros corazones, no significa que no estén rotos por todos los sitios posibles. Volar para sanarnos, porque al final, la única forma de curar nuestros corazones es hacerles sentir que pueden palpitar con la misma fuerza que antes sin quebrarse al primer intento.

8 comentarios:

  1. Puede que nosotros no decidamos el momento y el lugar para recordar, pero si que tenemos el control, aunque no lo parezca, de decidir como recordamos lo vivido

    ResponderEliminar
  2. No es un consuelo, pero lo que hemos vivido, inclusive lo que ahora nos causa dolor, es nos hace ser quién somos. En todo caso, como dije en un escrito de hace unos meses "aquello que resquebraja mis fuerzas, recompone mis ánimos, me dirige hacia el camino que debo seguir, y sobre todo, me hace ser quien soy y quien quiero ser".
    Es cierto que tenemos mucho que perder al enfrentarnos a nuestros peores recuerdos, pero el perjuicio de no afrontarlos se me antoja aún mayor.
    Me ha gustado el escrito, me acabo de hacer seguidor para ojear posteriores publicaciones. ¡Un saludo!

    ResponderEliminar
  3. Realmente nunca se sabe dónde podremos volver a encontrar la felicidad. Por muy efímera que nos resulte.
    Sabes que siempre necesitaremos volar. Lo más alto posible, aun sabiendo que podemos caer. Si nos quedamos dónde estamos no podríamos salir adelante, o quizá sí, pero sería mucho más complicado ( y las cosas ya son complicadas de por sí ).
    Se que si eres capaz de escribir todo esto es porque en el fondo, avanzas. Se que siempre te lo digo y que quiza de tanto repetirlo pierda valor, pero es cierto: eres fuerte Cold. Te mereces tener algo mejor Cold, algo menos complicado, algo a lo que te haga falta pensar. Que no te haga sufrir, que no te haga cuestionarte en que momento dejaste de ser tú...
    Aún no sé que es ese algo, pero te aseguro que lo veremos juntas. :)

    Te quiero mucho Cold, Lo sabes (:

    ResponderEliminar
  4. Los corazones se rompen y a pesar de ello siguen latiendo.
    El problema viene cuando no somos capaces de latir con ellos, cuando el dolor es tan fuerte que perdemos todo conocimiento del ritmo de nuestro aliento.
    Pero la mente, amiga y enemiga a partes iguales, nos ayuda y nos condena en la misma medida. Recuerdos, olvidos...

    La única cura es el tiempo... y mientras tanto, tienes toda la razón, volemos.


    Besos grises.

    ResponderEliminar
  5. Volar. Huir, aunque solo sea un instante, y olvidar por un momento el mural de cicatrices que nos cubre el corazón como una trágica obra de arte.
    Es terrible que este tipo de situación sea el día a día de tantas personas, que haya tanta gente que vive con un saco de recuerdos envenenados atado a la espalda, incapaces de levantar el vuelo aunque solo sea un instante...

    Siento mucho haberme desvanecido, cielo, pero ya habrás imaginado que es por la Selectividad. Espero que ahora que el verano está a punto de empezar tú y yo volvamos a pasarnos por aquí un poco más a menudo. O por lo menos tú, que esto de regresar y encontrar que solo tengo una entrada para leer, con el mono que he pasado, me parece muy sucio ¬¬
    Creo que ya has leído la primera página de "Cinco Razones para Morir" en mi página de Facebook, pero tranquila, que cuando tenga un poco más te lo mandaré por correo (y de paso te responderé, que tengo un cargo de conciencia terrible). Serás la segunda en leerlo, después de mí xD

    En serio, no sabes lo mucho que me ha costado mantener el ordenador apagado y no pasarme por aquí, pero la espera realmente compensa.

    Un beso gigantesco :)

    ResponderEliminar
  6. Siempre que regreso a estos parajes salgo con el corazón tocado. Realmente tienes un don para transmitir aquello que (al menos unos pocos) hemos llegado a sentir. Porque el corazón es mucho más que una máquina, es una forma de vida. Y a veces se nos olvida lo fuerte que es, lo mucho que llega a aguantar y a cuidarnos. También se cabrea con nosotros, claro está, cuando no le damos vacaciones en mucho tiempo. Pero siempre acabamos haciendo las paces con él a base de volar...
    Los recuerdos en cambio...suelen ser más despiadados. Pero recuerda que ellos existen gracias a ti, y no a la inversa :)
    Me ha encantado...y me quedo cortísima niña!!!
    Un abrazo inmenso!!!

    ResponderEliminar
  7. ...
    ¡Lo sientooo! ;_; Sé que te prometí hace tiempo que respondería a tu e-mail, pero no sé, lo he ido dejando pasar y... No, pero ya prometido: este fin de semana te contesto sí o sí, que tengo ganas de contarte algunas cosillas.
    Me alegro de que te guste Ocaso, es mi novela/saga sin escribir favorita, y precisamente por eso, aunque no puedo evitar escribir fragmentos, dudo que la empiece en serio hasta estar seguro de que puedo conseguir el resultado que quiero. Por otra parte, de "Cinco Razones para Morir" tengo pocas noticias, sobre todo porque creo que voy a borrar todo lo que llevo y empezar de cero :( Ya te explicaré en el correo por qué, y a ver si puedes ayudarme con mi bloqueo artístico.
    Pero, yendo a lo importante... ¿Todavía no has terminado con tus exámenes? Porque yo quiero más de tus palabras D: No sé si a estas alturas ya te habrás dado cuenta, pero soy un yonki, y no puedes dejarme un mes entero sin palabras nuevas que me entra mono.
    Así que, cuando tengas tiempo, por favor, prométeme que subirás algo, aunque solo sean unas cuantas líneas, ¿vale? :)
    Un beso gigantesco, y mucho ánimo.

    ResponderEliminar